Quisiera que fuera el momento
de decir adiós,
pero no logro olvidarte.
Día a día tu recuerdo me persigue
como un fantasma.
Noche a noche te sueño,
besándome, acariciándome,
amándome,
como si nunca no hubiéramos dicho
adiós.
Pero todo sueño tiene su fin
y el mío termina
con los primeros rayos de luz.
No hay comentarios:
Publicar un comentario